quarta-feira, julho 28, 2010

Espanha: Madrid impõe novas regras financeiras às Comunidades Autónomas

Escrevem os jornalistas do ABC, A. Fernandez e M. Veloso que “todas la comunidades autónomas tendrá que apretarse el cinturón para mantener su techo de déficit en el 1,3% del PIB para 2011, según ha estipulado el Ministerio de Economía. Un recorte importante si se tiene en cuenta que, para 2010, el límite fijado por el Gobierno se establecía en el 2,5%. El Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) acordó ayer que este objetivo de estabilidad presupuestaria está condicionado a que las comunidades autónomas presenten o actualicen sus planes económicos financieros y a que las medidas incluidas en éstos sean declaradas idóneas por el CPFF. La ministra de Economía, Elena Salgado, se mostró satisfecha con el resultado de la reunión. Sin embargo, no todos los consejeros de hacienda regionales compartieron el entusiasmo de la vicepresidenta segunda del Gobierno. En declaraciones posteriores a la reunión, los titulares de la Comunidad de Madrid, Antonio Beteta, y de la Comunidad Valenciana, Gerardo Camps Devesa, lamentaron la falta de soluciones por parte del equipo económico del Gobierno. Una petición en la que coincidieron todos los dirigentes regionales. En palabras de Beteta, «el Gobierno ha hecho un ejercicio de fariseismo al no poner encima de la mesa ninguna medida concreta para reducir el déficit». Más aún si se tiene en cuenta que el coste de «las exigencias de la Comisión Europea el recorte de 20.000 millones de déficit recae sobre las cuentas autonómicas». Una crítica a la que Elena Salgado respondió con una referencia al decreto ley que firmó el Ejecutivo en el mes de mayo y que contenía medidas de ajuste (como el recorte de los salarios a empleados públicos, la reducción en el coste de los medicamentos y en el gasto en dependencia) que incumbía directamente a los gobiernos autonómicos por lo que pidió coherencia, sobre todo, a las comunidades gobernadas por el PP. La ministra Salgado aprovechó además la oportunidad para anunciar la celebración de un seminario en el mes de noviembre donde los representantes regionales podrán analizar junto al Gobierno en qué medida afectan los cambios que se introduzcan en el Consejo Europeo que se prevé en el mes de octubre, y que podría alterar la forma de presentar los presupuestos en todas las administraciones públicas. Sobre la referencia que se toma a la hora de determinar el techo de déficit de las comunidades (el PIB regional), la titular de hacienda andaluza, Carmen Martínez Aguayo, pretendía entablar un debate, ya que considera que no se ajusta a las necesidades de cada territorio. En este sentido, el Gobierno no descarta que que se pueda modular el déficit, por ejemplo, de acuerdo al grado de endeudamiento,pero no para el próximo ejercicio. La ministra de Economía hizo hincapié en el compromiso de todas las regiones por «arrimar el hombro» para salir de la complicada situación que vive España y recordó que el objetivo de estabilidad común «es siempre importante y este año lo es todavía mucho más».
Subasta con éxito
Y mientras se cerraba ese acuerdo para el techo de gasto de las comunidades autónomas, el gabinete económico recibía las buenas noticias que para España llegaban desde los mercadados de deuda. El Tesoro público consiguió colocar ayer 3.428 millones de euros en letras a tres y 6 meses, rozando el máximo previsto por el emisor, que se había fijado en 4.000 millones. A pesar de no alcanzar ese objetivo, lo satisfactorio fue la rebaja en el rendimiento ofrecido a los inversores. Los títulos que vencen a los tres meses se adjudicaron a un tipo de interés marginal del 0,69%, frente al 0,95% ofrecido en la anterior subasta de este tipo de letras; en los que vencen al medio año, fue del 1,17%, mientras que en la anterior emisión había sido de 1,65%. Con esta subasta, la última de julio, el Estado cierra un mes en el que se jugaba mucho en este mercado. Aunque las operaciones no empezaron muy bien -las emisiones de la primera quincena mantuvieron el ritmo ascendente de los meses anteriores en los rendimientos ofrecidos-, las dos últimas subastas tuvieron un mejor comportamiento de la demanda y, sobre todo, permitieron colocar los títulos a un menor precio. De esta forma, los rendimientos a pagar no se dispararon. Según fuentes del Ministerio de Economía, esa menor exigencia de los inversores, que ya se venía viviendo en las dos últimas semanas, ha sido corroborada por la publicación de los test de estrés. De hecho, la prima de riesgo cayó ayer a niveles del 20 de mayo. El diferencial entre el bono español a diez años y el alemán, referente en Europa, descendió hasta los 139 puntos básicos, después de alcanzar los 220 durante el mes de junio, cuando las dudas sobre la solvencia española hicieron saltar todas las alarmas".

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