sexta-feira, setembro 19, 2014

Escocia-Cataluña, diferencias y similitudes

"La demografía: Cataluña y Escocia tienen un tamaño humano similar (7,5 millones la primera; 5,3 la segunda); sin embargo, son diferentes por su peso e influencia en el conjunto del Estado que las abarca o engloba. Los catalanes representan el 16% de los españoles. Los escoceses suponen el 8,4% de la población británica.
La historia: Ni España es el Reino Unido, ni Cataluña es Escocia. Al Reino Unido la época contemporánea lo encontró en su fase nacional e imperial ascendente. A España en la descendente. De forma que el primero fraguó más densamente su unidad nacional -plurinacional- y en un entorno de estabilidad política; y la segunda, de forma precaria y vulnerable, con continuos cambios de régimen y golpes de Estado.
La economía: Ambos nacionalismos albergan un argumentario de reivindicaciones económicas. Las situaciones económicas no son opuestas. Ambas comunidades son relativamente prósperas, aunque albergan zonas, ciudades y sectores en decadencia. Aunque en relación con el conjunto de los Estados de los que forman parte lo es bastante más la catalana, cuyo PIB per cápita supone el 117,8% de la media española (2011); que la escocesa, que ostenta el 99% de la media británica, tras Londres y el Sudeste, y que en la época de bonanza (1977-2007) creció a un ritmo muy modesto del 2,3%, frente al 2,8% de los territorios europeos comparables. En el nivel europeo, se trata de regiones más bien ricas, con rentas per cápita superiores a la media.
Autogobierno: la reclamación de un mayor autogobierno en Cataluña llega sobre todo a causa de una frustración: la sentencia restrictiva del Tribunal Constitucional que en 2010 corrigió a la baja el contenido federalizante de su segundo Estatuto de autonomía en la democracia reinstaurada, tras ser votado por los ciudadanos en referéndum. Las apuestas por un mayor autogobierno no exhiben en Escocia eses carácter reactivo. En Escocia, la propuesta de un referéndum está más trabajada y consolidada, arranca oficialmente de la National Conversation, de 2007, y el primer borrador de la ley es de febrero de 2010. En Cataluña el proceso ha sido más desordenado y ha imperado la improvisación. La propuesta solo ha adquirido peso político desde otoño de 2012 y el borrador del referéndum no se elabora hasta diciembre de 2013. En Escocia, con una pregunta clara producto de una negociación y pacto con el Gobierno británico. En el caso hispano-catalán no se produjo siquiera un diálogo inicial" (texto do El Pais, com a devida vénia)